PUTO VIENTO .....

Puto viento... parece mentira, no te acostumbras nunca... nada como el cierzo para joder una ruta perfecta.
La mañana dominguera amanece perfecta, cielo despejado, buena temperatura, un pelo de aire en apariencia. Después del ritual de las 9, gasolina, cortado y mapa, enfilamos por la carretera de Madrid con el objetivo de hacer el recorrido entre Morata de Jalón y Calatayud por la carretera CV-601 que va pareja al río Jalón y encajonada por preciosos cortados. Nunca habíamos estado por ahí pero sobre el mapa prometía ser divertido.
Por la nacional a la altura de la Feria de Muestras empieza mi pesadilla, el cierzo. En el alto de la muela me llevaba de lado a lado, jodidas trail!!!. Bueno, por fortuna una vez pasada la Almunia, donde el caniche contracturador y bicha estaban durmiendo su resaca, parece que el viento iba desapareciendo. Es más se nota al dejar el valle del Ebro que incluso hacía más sol, no tanta calima.
Cojemos la salida hacia Morata, atajo por la cementera y llegamos a dicha carretera. Una grata sorpresa. Asfalto impecable, sol, sin viento y unas vistas preciosas, la pega es que se te hace corto.

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A la altura de Mores, decidimos tirar para Illueca sin saber que ibamos a ver, por fortuna fue buena la elección. Illueca es un pueblo bastante majo donde destaca el Castillo del Papa Luna.
Este castillo es el lugar donde nació el Papa Luna, famoso porque hizo uno de los primero hoteles de Peñiscola. El castillo tiene una zona que se visita una hospedería. Entramos a dar una vuelta y de paso preguntamos en el restaurante si daban almuerzos. Una camarera tras poner cara de no saber que eran unos huevos fritos, finalmente consiguió enterarse y nos quedamos en la cafetería. El sitio la verdad que de categoría, vamos que pareciamos un par de bujarrones recuperando fuerzas después de haber estado por la noche soplándonos las nucas. A decir verdad los huevos estaban mejor de lo que esperaba aunque eso sí el jamón pasao pasao.

La vuelta a casa como siempre en contrarreloj para intentar no tener bronca. En principio volvíamos por el mismo recorrido que a la ida, pero pasada la Almunia, vuelta a aparecer el Puto Viento. Pero esta vez aún más fuerte. De verdad que hasta la rueda delantera me zigzagueaba según las rachas. A la altura de Epila decidimos probar si por la carretera de la ribera haría menos aire, pero más de lo mismo. Una paliza tonta por culpa del aire. Sólo se fué pasado Alagón porque te da de espaldas y no de lado.
Una ruta perfecta para repetir un día sin aire y a ser posible en parejas porque en el Castillo ya nos miran con ojitos.....